Aunque sus responsables no aclararon a esta agencia el estado de las conversaciones, parece que varios departamentos culturales de los principales bancos españoles están muy interesados en hacerse cargo de la financiación de estos conciertos, los de mayor prestigio y precios más elevados del panorama de la música clásica en nuestro país.

A cambio de los cerca de 200 millones de pesetas que cuesta, el ciclo de conciertos concede al patrocinador el prestigio de raer a las mejores orquestas e intérpretes del mundo y también le garantiza un elevado número de abonos de la temporada, entre 60 y 80, que pueden repartirse entre directivos o clientes.

En la presente temporada, que aún cuenta con el patrocinio de Tabacalera, figuran la Philarmonia Orchestra dirigida por Lorin Maazel, la Sinfónica de Boston dirigida por Seiji Ozawa, los Virtuosos de Moscú conducidos por Vladimir Spivakov o la Filarmónica della Scala con Carlo María Giulini. Los próximos días 12 y 13 ctuará la Filarmónica de Israel, con Zubin Mehta al frente.

En algunos de los casos existen acuerdos y convenios para que las formaciones contratadas pasen también por otros escenarios de la geografía española, como el Palau de la Música de Valencia o el Teatro de la Maestranza de Sevilla.

TABACALERA ABANDONA

Con motivo del Plan de Medidas de Ahorro que impuso Tabacalera en el último trimestre del año pasado, que ha supuesto una reducción de 5.000 millones de pesetas para este año, una de las prtidas que sufrió un importante recorte fue el área de patrocinios y la Fundación que sostiene la empresa.

Fuentes de la Fundación Tabacalera señalaron a Servimedia que las actividades que cubren se centran habitualmente en el terreno de la música y las artes plásticas, que se suelen abordar en proyectos concretos de mecenazgo, pero el patrocinio de Ibermúsica era la partida más gravosa.