Según el colectivo de pilotos, "iberia pretende que la seccin sindical asuma, sin más, los incumplimientos por parte de la empresa del acuerdo de diciembre de 1994, y además, que este acuerdo entre a formar parte del convenio colectivo de los pilotos.

Para el Sepla-Iberia, los puntos de incumplimiento que la dirección sea aceptada por los pilotos son los que hacen referencia a la ampliación de capital de 130.000 millones de pesetas prevista en la compañía aérea, así como de las garantías de que no se venderían activos.

Este sindicato señala que el plan reogía el compromiso de la dirección de mantener Iberia como una compañía global, con control sobre negocios como las empresas participadas americanas, o las actividades mantenimiento de aeronaves y handling, aspectos que, a su juicio, ni la empresa ni el plan que se perfila tras su paso por Bruselas está en condiciones de cumplir.

Estas manifestaciones del Sepla contradicen la versión de la reunión hecha pública por la dirección de Iberia, en las que se asegura que el motivo del desacuerdo siguen siend las cuestiones económicas del plan, incluidos los sacrificios salariales que aceptaron los pilotos y que no están dispuestos a consolidar en su convenio colectivo.