Fuentes del Sepla indicaron a Servimedia que la reunión del pasado viernes por la tarde concluyó sin acuerdos y con un "mal clima de diálogo", lo que no anima a pensar en una rápida solución al enfrentamiento entre los pilotos y la compañía.

Por su parte, la dirección de Iberia confirmó que "las posturas siguen donde estaban", y añadió que si el Sepla no varía su actitud, seá muy difícil lograr un acuerdo, ya que "la compañía ha tocado techo con la última oferta económica rechazada por los pilotos".

Esa oferta consiste en la retribución de 3.689 millones de pesetas a cambio de medidas de productividad, lo que consolidaría en sus nóminas los pagos por ese mismo concepto que ya han cobrado en 1998 y un incremento salarial del 9,36%.

Frente a esta propuesta de la empresa, el sindicato de pilotos mantiene su reivindicación de incrementos salariales equivalentes al IPC. La compañía, en cambio, asegura que junto a esta demanda figura la de poner un precio al incremento de productividad muy superior al que se venía aplicando en los últimos tres años, de manera que el incremento real es del 18% y equivale a unos 5.763 millones de pesetas, unos 2.000 más de los que Iberia se muestra dispuesta a pagar.

Además, en Iberia destacan que la mejor demostración de que se ha tocado techo en la negociación con los pilotos es que ya se ha empezado a cancelar un 20% de los vuelo previstos hasta fin de año, con especial incidencia en los de largo recorrido que tienen como destino América.