La operaciónestá dirigida y asegurada por Merryl Lynch International y tiene un periodo de amortización de 3 años en dos tramos de interés fijo y variable, respectivamente, manteniendo Iberia la opción de reembolso de los mismos al final del primer año.

Tras las exposiciones de la emisión realizada por los responsables de Iberia ante inversores nipones, los portavoces de la compañía aseguran que la operación está teniendo una excelente acogida, sobre todo por el compormiso de reducción de costes y aumento de la poductividad alcanzado entre la dirección y los trabajadores, para lograr el visto bueno de Bruselas a una ampliación de capital de 130.000 millones de pesetas.