Cecilio Pérez Velasco, responsable del sector aéreo de esta federación ugetista, explicó que la dirección de Iberia tiene prevista una regulación temporal de empleo si las cancelaciones llegan al 15 por ciento diario.

En los últimos días, las cancelaciones de vuelos procedentes han suprado ya el 30 por ciento en algunas líneas, especialmente las de Estados Unidos, Cánada y Méjico.

Para el dirigente ugetista, la regulación tendría que ser negociada con los sindicatos y, de ser ineludible, sólo debería afectar al colectivo de contratados para cubrir las necesidades de servicio en las temporadas altas, que son unos 2.500.

La plantilla de tierra de Iberia está formada actualmente por 19.000 empleados fijos, algo más de 2.000 fijos discontinuos y otros 2.000 eventuales.

Cecili Pérez aseguró que UGT no está dispuesta a aceptar ninguna reducción de plantilla, pero acepta estudiar una regulación temporal de empleo en atención a las especiales circunstancias creadas por la guerra del Golfo.

Precisó, no obstante, que su sindicato intentará agotar todas las fórmulas antes de negociar una regulación de empleo y, con ese fin, ha solicitado una entrevista con el presidente de Iberia, Miguel Aguiló.