Según informó hoy a Servimedia un portavoz de Iberdrola, ambas sociedades dejan abierta la puerta a la incorporación de otros socios en un futuro. Su primer objetivo será identificar las localizaciones adecuadas en las que poder llevar a cabo estas nuevas centrales eléctricas.

El plazo para presentarse a la puja por los emplazamientos, de modo preliminar, concluyó hoy martes.

Iberdrola y SSE consideran que, sumada a la generación eléctrica de origen renovable, la energía nuclear es "esencial" de cara a conseguir un suministro diversificado y alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de CO2.

Según Iberdrola, que opera en Escocia a través de Scottish Power, "la joint venture entre estas dos compañías eléctricas líderes en el Reino Unido contará con la experiencia en el desarrollo y operación de infraestructuras energéticas de primer orden y la fortaleza financiera necesarias para asegurar el éxito de la puesta en marcha de las nuevas nucleares en el Reino Unido a lo largo de la segunda década de este siglo".

Además, "ambas sociedades aportan relaciones de primer nivel con los proveedores de los equipos necesarios para afrontar estos proyectos, con lo que evitan la dependencia de un solo suministrador y podrán elegir en cada momento y para cada elemento la mejor tecnología disponible en el mercado".