Una fuente de Iberdrola consultada por Servimedia quitó hierro a esta decisión y destacó que el organismo regulador "ha dejado la puerta abierta a que se modifique el tema".

Recordó que la CNE ha aprobado un procedimiento de seguimiento y control de las condiciones impuestas, con el objetivo de vigilar e investigar a las compañías implicadas.

De hecho, el organismo que preside Maite Costa ha remitido solicitudes de información a ACS, Unión Fenosa, Omel e Iberdrola.

La citada fuente incidió en que la nueva posición de ACS en Unión Fenosa, donde ha consolidado sus cuentas, cambia la situación de esta compañía en Iberdrola, competidora de la energética gallega.

El propio presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, afirmó recientemente que ACS es su principal competidor, ya que, en caso de que lanzara con éxito una opa junto con EDF, la constructora podría llegar a trocear Iberdrola para integrar una parte en Unión Fenosa.

Además, ha presentado ante la Comisión Europea una denuncia contra el Estado francés, por considerar que la eléctrica francesa EDF tiene un blindaje ilegal ante el interés de otros grupos por entrar en su capital.

Por otro lado, Iberdrola está pendiente de obtener ua autorización de la Comisión Pública de Servicios de Nueva York para culminar la compra de la estadounidense Energy East.

Este organismo paralizó su decisión ante los rumores de opa por parte de EDF y ACS. Iberdrola, en respuesta, trasladó a esta comisión la idea de que unos rumores no bastan para paralizar una operación de tal calado.

La decisión de Nueva York ha sido aplazada hasta el 17 de marzo.

Según Iberdrola, "no existe contradicción" entre su postura en Nueva York (donde se quita hierro a unos meros rumores) y su petición a la CNE (por entender que ACS vulnera los límites legales).