Según indica Iberdrola en un escrito remitido hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, la mayor apertura de mercado acordada permitirá, respecto a los establecido en la vigente Ley Eléctrica, incrementar de foma notable el número de consumidores cualificados y dotar de gran dinamismo a este mercado.

El consumo necesario para ser consumidor cualificado se reducirá trimestralmente desde los 15 Gwh hora actuales a 5, 3, 2 y 1 Gwh hora, volumen que se alcanzará el 1 de octubre de 1999.

Además, según la compañía, la fijación en la senda tarifaria para los próximos tres años elimina incertidumbres para las empresas eléctricas.

El acuerdo permite también la titulización de una parte importante de los cotes de transición a la competencia no asociados al consumo de carbón nacional, garantizando su recuperación mediante la afectación a este fin de una parte de la facturación del sector eléctrico. El resto de los costes de transición finalmente reconocidos se recuperarán según el sistema establecido actualmente hasta el año 2007.

Iberdrola afirma que los efectos positivos sobre los ingresos del sector derivados de la garantía de la recuperación de los costes de transición a la competencia compensan en prte los efectos negativos derivados de la bajada de las tarifas de peaje.

Por otro lado, la compañía estima que la disminución total de los costes de transición a la competencia en relación con las cantidades máximas contempladas en la ley no van a tener un efecto significativo sobre las cuentas de resultados de la empresa.