En una dura intervención ante los medios de comunicación, tras entrevistarse con Aznar n La Moncloa, Ibarretxe informó de que había recordado al jefe del Gobierno que el problema del País Vasco es de naturaleza política y que se tiene que solucionar indepedientemente de que exista o no la violencia de ETA. Reconoció sus "grandísimas discrepancias políticas" y le advirtió de que el "insulto y la descalificación no son el camino".

Fuentes del Gobierno vasco informaron a Servimedia de que la reunión de Ibarretxe y Aznar, de algo más de dos horas de duración, se desarrolló en el "peor de os escenarios posibles", es decir, que Aznar impusiera la ruptura con Lizarra como premisa indiscutible para hablar con el PNV y sin el debido respeto a su opción política.

Tras afirmar tajantemente que "no soy el 'lehendakari' de Lizarra, sino el de todos los vascos", Ibarretxe aseguró que el Gobierno "se equivoca" por tener como objetivo prioritario "neutralizar al nacionalismo vasco".

RESPETO Y EDUCACION

Transmitió el "disgusto" de la sociedad vasca por los continuos ataques al Gobierno vsco, sus instituciones y al propio "lehendakari" por parte de miembros del Gobierno y del PP, aunque añadió que "no voy a pagar con la misma manera".

Ibarretxe reiteró en numerosas ocasiones que, en democracia, las "formas", el "respeto" y la "educación" son imprescindibles, por lo que advirtió a Aznar de que no le puede obligar a que "piense como él" ni a que, en consecuencia, tenga que abandonar su estrategia política, en alusión al Pacto de Lizarra.

"Pido respeto a lo contruido hasta ahora a lo que hoy somos, a los ámbitos jurídico-políticos que nos hemos dotado para, desde esta realidad, poder decidir libre y democráticamente lo que queramos ser en el futuro los propios ciudadanos y ciudadanas vascas", indicó.

El "lehendakari" solicitó a Aznar un "desarme verbal" porque "el insulto y la descalificación no es el camino". Asimismo le recordó que "nunca ha sido el 'lehendakari' de Lizarra" y que, "siempre que he tenido que elegir entre la construcción nacional y el derecho a la vida, h elegido siempre el derecho a la vida".

"EUSKADI ES UNA NACION"

Ibarretxe advirtió a Aznar de que el problema del País Vasco es de naturaleza política y que "no se puede confundir el problema de la violencia con el problema político, que es anterior a la violencia", anterior a la propia ETA.

"El problema político existirá con independencia de si ETA desaparecerá", dijo, para añadir que este escenario "no lo cambiará nadie, ni con bombas, ni con descalificaciones".

Indicó que había acdido a La Moncloa para interntar afrontar "un conflicto de naturaleza política y poner fin a más de 160 años de convivencia frustrada".

Por ello, señaló que "Euskadi es una nación anterior al propio Estado español" y este problema político "no nació en el 58 o en el 59, cuando ETA empezó a andar".

El "lehendakari" apostó por el diálogo porque, aunque la confrontación social puede tener "réditos electorales", puede llevar a la "fractura social".

En este punto, pidió al PP que se sume a as conversaciones de los partidos a favor de una nueva mesa de diálogo y que abandone su "soledad e incomunicación". Advirtió de que "no vale sólo" las apelaciones generales a la Constitución y el Estatuto, porque "no se cumplen".