Egido confía que el Gobierno español predique con el ejemplo y sea el primero que "perdone" su deuda a los países afectados. "Quiero creer en la buena voluntad del Gobierno y que no se quede en buenas palabras. Seguro que es un trámite lento -la condonación de la deuda-, porque es una cantidad importante la que deben a España", indicó.

El portavoz de Solidarida Internacional, organización que tiene a 13 personas destinadas en Centroamérica y Caribe, afirmó que "lo duro va a ser dentro de 6 meses cuando mucho de estos fondos de emergencia se agoten y no sean sustituidos por otros. Las tareas de reconstrucción de los países es más importante, incluso, que la ayuda de emergencia", concluyó.