Ferreras señaló la conianza de la SEPI en que las huelgas de pilotos no afecten a la venta de la compañía aérea, que el Gobierno quiere dejar cerrada antes del verano.

A su juicio, los dos socios estratégicos que ya tiene Iberia, British Airways y American Airlines, que controlan el 10%, "están curados en salud" de las huelgas de pilotos, porque la presión de estos colectivos no son exclusivos de la compañía española, dijo.

Asímismo, expresó su confianza en que las entidades y empresas españolas que puedan incorporars al capital de Iberia en los próximos meses "sepan descontar también este efecto", y que los pequeños inversores que decidan colocar sus ahorros durante la OPV de la compañía no se vean condicionados por una decisión de huelga".

Ferreras aprovechó para sumarse a las críticas del Gobierno y de la dirección de la compañía por la convocatoria de huelga de los pilotos en Semana Santa y agregó, como representante del principal accionista de Iberia, que los motivos aducidos por el colectivo "no los termino e entender y me parecen poco serios".

Respecto a las voces que se han alzado para pedir la modificación del derecho de huelga tras conocerse la convocatoria de los pilotos, el presidente de la SEPI dijo "el derecho de huelga es un derecho que está perfectamente reconocido y el entrar en cómo se debe aplicar es extremadamente complicado.

Cualquier inicitiva de este tipo, añadió, no puede hacerse sin mirar muy bien el articulado de la ley que limite ese derecho, aunque reconoció que existen colectios pequeños que tienen capacidad de provocar graves molestias a las ciudadanos ejerciendo una fuerte presión social.