La Frater recordó que el derecho a la huelga no es absoluto, por lo que denunció lo que consideran una utilización de la salud para favorecer intereses y derechos "de carácter inferior".

Por ello, apela a la responsabilidad de los sindicatos convocantes, que "deberían tener en cuenta la responsabilidad que adquieren para anteponer los intereses y peticiones del colectivo que representan, al respeto que se debe al sufrimiento humano de personas inocentes, conculcandoa veces derechos inalienables de la persona con daños y lesiones gravísimas".

Asimismo, responsabiliza a las administraciones competentes del paro y sus consecuencias, por su incapacidad para plantear soluciones eficaces.

Ante esta situación, la Frater instó a todas las partes implicadas en el conflicto a que intensifiquen el diálogo y pongan en marcha medidas tendentes a mejorar el sistema sanitario.