Concretamente, la CESM propone la mediación de Abril Martorell y la desconvocatoria de la huelga si Sanidad firma un compromiso de mejora salarial y de la gestión del sistema sanitario. Los médicos aceptan la oferta de Sanidad para 1995 "en la medida en que la Administración se comprometa a compensar los desequilibrios salariales en 1996 y 1997".

Además, los facultativos proponen "la introducción de una racionalización y mejora de la gestión hospitaaria que aporten los recursos económicos adicionales necesarios", al tiempo que se comprometen a "asumir una serie de objetivos dirigidos a mejorar la asistencia al paciente, como reducir las listas de espera y reorganizar la consultas externas".

Según la CESM, en su propuesta de acuerdo ha tenido muy en cuenta las demandas de los usuarios y las dificultades presupuestarias de la Administración.

Los huelguistas proponen "una mediación que, en el plazo máximo de diez días, arbitre la redacción y frma de un documento que recoja la voluntad del Ministerio de Sanidad y la CESM" de asumir una serie de compromisos.

Los médicos se comprometerían, entre otras cosas, a reorganizar las consultas externas, estudiar el rendimiento en quirófanos, favorecer la implantación de la libre elección de especialista, reducir las listas de espera, etc.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad debería comprometerse a potenciar la participación activa de los médicos y "contribuir a eliminar, de forma sustancial, os actuales agravios económicos comparativos con las diferentes comunidades autónomas".

Ambas partes se comprometerían a respetar los acuerdos ya alcanzados en el transcurso de la negociación en materia de estabilidad laboral de los médicos interinos, seguro de responsabilidad civil, adecuación de la atención continuada (guardias médicas), el prorrateo de las mismas y el avance en la adecuación de la organización hospitalaria.

En cuanto estuviera firmado por las partes el documento arbitrado, la ESM desconvocaría la huelga. A partir de entonces, con la asistencia del mediador, se iniciaría el proceso negociador "tendente a concretar los pormenores del mencionado documento de intenciones, con la finalidad de alcanzar un acuerdo definitivo antes del 31 de julio".

La propuesta de Abril Martorell como mediador obedece, según la CESM, a su trayectoria profesional, experiencia negociadora y conocimiento del sistema sanitario español. Además, presidió los trabajos de la Comisión de Análisis y Evaluaión del Sistema Nacional de salud.