ANGED expresó su rechazo a la convocatoria de huelga, que considera "eminentemente política", y destaca que "no existe materia ni posibilidad de negociación alguna entre los convocantes y las empresas u organizaciones empresariales, ya que éstas últimas no pueden ofrecer nada en las materias objeto de conflicto, motivo éste que hace evidente el móvil estrictamene político de los convocantes".

La patronal que agrupa a las grandes superficies considera que el daño que puede ocasionarse por el seguimiento de la huelga en nuestras empresas carece completamente de sentido, ya que las pérdidas que se causen (salarios, ventas, retrasos en pedidos, materias primas, confianza de nuestros clientes) no las soporta el Gobierno, sino que inciden en el conjunto de quienes dependen de la marcha de estas empresas, que pueden verse abocadas a graves perjuicios económicos".

A pesar de abrir los centros el 20 de junio, ANGED asegura que respetará el derecho de todos y cda uno de sus trabajadores a decidir libremente su participación, al tiempo que garantizará los derechos de quienes deseen trabajar.