Esta propuesta supone quelos proveedores pierdan 17.000 millones y tengan que esperar determinados plazos para el cobro de sus restantes 16.000 millones adeudados.

Los proveedores afectados, que suman más de 6.000 empresas, se reunieron el pasado jueves en Madrid y decidieron realizar medidas de presión para que el Gobierno reconsidere su posición y conceda un crédito oficial a través del ICO (Instituto de Crédito Oficial) para que la empresa salga de la situación en que se encuentra.

Los subcontratistas estiman que no hy garantías suficientes sobre el cobro de esos 16.000 millones, ante el temor de que una gran constructora compre Huarte por la mitad de su valor, perjudicando a los acreedores.

Entre las medidas de presión acordadas está que cada empresa afectada dirija un escrito al ministro de Economía, Rodrigo Rato, y al de Fomento, Rafael Arias Salgado, protestanto por la no concesión del crédito y mostrando su disposición a capitalizar parte de sus deudas.

Además, acordaron la realización de otras "enérgica medidas de presión", que serán anunciadas más adelante.