La fiscal fue asesinada por orden del cabecilla de ETA, Francisco Múgica Garmendia, "Artapalo", que facilitó infomación y una foto de la magistrada a Henri Parot, jefe del "comando itinerante" y autor material del atentado junto a otro terrorista francés, Jacques Esnal.

Ambos planearon la acción para el mes de junio, pero no encontraron a Carmen Tagle en Madrid, por lo que volvieron a la capital en el mes de septiembre y, tras robar un vehículo, esperaron a la fiscal en las cercanías de la Audiencia Nacional.

Cuando la fiscal salió de trabajar, los terroristas la siguieron hasta su casa, en la calle Julio Placios. Allí, mientras Carmen Tagle estaba buscando las llaves de la puerta del garaje, fue asesinada por los dos etarras, que efectuaron diez disparos.

Henri Parot fue detenido en un control de carretera por la Guardia Civil el 3 de abril de 1990, cuando viajaba en un coche cargado con 300 kilos de amonal a Sevilla, donde pensaba atentar contra la Jefatura Superior de Policía.

En la actualidad se encuentra encarcelado tras haber sido condenado por la Audiencia Nacional a 30 años de reclusión mayr por la muerte de la fiscal Carmen Tagle y a otras penas por otros asesinatos de los que también fue autor.