En la Costa del Sol se perdieron unos 5.000 empleos durante el año pasado en el sector, mientras que para este año se espran "negativos efectos", según González, en zonas costeras, como la Costa Brava o la misma Costa del Sol, y en Madrid, "como consecuencia de la encubierta reconversión que se está desarrollando en los establecimientos hoteleros".

En Baleares se perdieron alrededor de mil empleos en hostelería durante 1993, mientras que la tendencia a la baja fue moderada en la Comunidad Valenciana, siendo Alicante la provincia más afectada de la región.

El responsable de hostelería de Comisiones ha denunciado la uesta en marcha de los nuevos contratos y señaló que "el de tiempo parcial sustituirá por completo al fijo-discontinuo, el más empleado en Baleares, lo que aumentará la precariedad laboral". A su juicio, el contrato de aprendizaje "esclavizará" a los jóvenes.

González indicó que de los 650.000 trabajadores del sector que hay en España, un 70 por ciento tienen contratos eventuales, mientras que en Baleares de los 50.000 trabajadores solamente un 16 por ciento tiene contrato fijo. El 84 por ciento restate son fijos-discontinuos o eventuales.

Por su parte, Ricardo Caro, secretario general de Hostelería de CCOO en Baleares, señaló que "en la comunidad autónoma el ajuste de los últimos años en las plantillas de los hoteles ha sido tan brutal que este año 93 podría considerarse como positivo. Hasta el mes de noviembre se mantenía el empleo, e incluso en temporada alta creció sensiblemente con respecto a años anteriores".

Javier González volvió a reclamar el reinició de las negociaciones sobre el covenio marco del sector, que quedaron paralizadas el 1 de diciembre pasado.