"Blanco quiere conducir esta región allá donde no tiene más que su interés personal por sentarse en este lugar, que tampoco es para tanto", explicó. Además, añadió que "en estos momentos tiene el rechazo de una parte impotante de su partido".

Hormaechea recordó que en las pasadas elecciones cántabras el PSOE no obtuvo los votos necesarios para ganar la presidencia del Ejecutivo y que la única solución que le queda a los socialistas es alcanzar un pacto.

"Un pacto con el Partido Popular sería absolutamente legítimo, pero éstos no quieren, por lo que la única fórmula es que los 21 diputados que constituyen la mayoría de esta región gobiernen a través de los pactos que sean precisos", explicó.

Por su parte, el residente del Partido Popular de Cantabria, José Luis Vallines, aseguró hoy que el plantemiento de su partido de no votar al candidato socialista en una posible moción de censura contra Juan Hormaecha no ha variado, a pesar del nuevo plazo dado por la Ejecutiva federal del PSOE para continuar las negociaciones.

"Cuando haya una moción de censura", dijo Vallines, "daremos nuestro punto de vista. Pero en todo caso, no vamos a hacer presidente a un socialista".

Respecto a las últimas delcaraciones dl lider del Partido Regionalista de Cantabria, Miguiel Angel Revilla, que acusó al PP de ser el culpable de la situación que vive la región, José Luis Vallines afirmó que "el desastre está generado por Juan Hormaechea, y a él le corresponde como presidente plantear una moción de confianza o presentar su dimisión".