Según explican en un comunicado, los desacuerdos más importantes con la citada instrucción se refieren, en primer lugar, a que no existe ninguna consideración especial para las horas nocturnas o festivas, que se consideran como si fueran todas diurnas laborables.

También se muestran en contra de la disponibilidad que se les exige para un día de cada tres (apate de sus días de trabajo) con el fin de cubrir posibles incidencias. Esta disponibilidad no se retribuye de ninguna manera, ni en tiempo, ni en dinero, recalcan.

Asimismo, denuncian que la Administración se reserva unilateralmente el derecho de prorrogar, sin previo aviso, la jornada de trabajo hasta 24 horas seguidas o de acortar los periodos de descanso.

Todo ello se produce, explican, casi un año después de la llegada de una nueva directora general, que pidió una tregua en las movilizaciones ue se estaban llevando a cabo desde la entrada en vigor de la citada instrucción para buscar una salida mediante la creación de un grupo de trabajo nombrado por ella, "cuyas conclusiones no van a servir para nada".

La huelga afectará considerablemente a los tráficos aéreo y marítimo, ya que las observaciones y partes son imprescindibles tanto para la navegación aérea como para la marítima.