LA HIJA DE FRANCO ROMPE TRES DÉCADAS DE SILENCIO EN UNA BIOGRAFÍA DE SU PADRE
- "Soy su hija y pocas sombras le voy a dar", señala la duquesa
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La hija de Franco, Carmen Franco Polo, ha roto un silencio público de más de tres décadas, para dejar testimonio escrito y ante las cámaras de los recuerdos que conserva de su padre.
La duquesa ha decidido hablar a iniciativa propia, cuando ha cumplido 82 años, los mismos con los que falleció el dictador. Sus palabras han quedado recogidas en el libro biográfico "Franco, mi padre", publicado por los historiadores Stanley G. Payne y Jesús Palacios, y en un documental que prepara el productor alemán Philip Selkirk.
El libro, presentado hoy, recoge cerca de 20 horas de conversaciones con Carmen Franco, quien, según aclaran los autores, no ha cobrado nada ni ha hecho corrección alguna al texto final.
La única hija de Franco y Carmen Polo deja sentado desde el arranque de la obra que guarda un buen recuerdo de su padre. "Yo soy su hija, pocas sombras le voy a dar", afirma. "Y las luces más importantes, creo que fueron elevar el nivel de vida, la seguridad social, preocuparse mucho de la gente para poder crear una clase media que hoy existe y que antes de mi padre no existía. Eso es lo más importante que consiguió".
"AFECTUOSO"
La duquesa evoca a Franco como un padre "afectuoso y cariñoso", que confió a su esposa la educación de su hija "como ocurría en cualquier familia tradicional", y que no jugó mucho con ella, pero que sí lo haría muchos años después con sus nietos.
Carmen Franco asegura que el estereotipo que pesa sobre su padre como una persona fría e inexpresiva tiene su origen después de la guerra, porque hasta entonces era bromista y más extrovertido, alguien que incluso acostumbraba a cantar zarzuela en los viajes: "Mi padre cambió mucho cuando fue nombrado jefe de Estado, por el sentido de la responsabilidad".
De la muerte de su padre, quiere dejar claro que ningún miembro de la familia fue partidario de prolongarle la vida, y el deseo era que el dictador falleciera en su casa, algo que no fue posible por las complicaciones que surgieron en el tramo decisivo de su enfermedad. "No fue una cosa premeditada por una cuestión política ni por preparar de alguna forma algo. Eso no es verdad y mi padre sufrió bastante".
Respecto a Don Juan Carlos, la duquesa comenta que su padre siempre fue "muy monárquico" y creyó que el futuro rey sería "fiel a los principios del régimen".
De las cuestiones más espinosas de la etapa de Franco, la apuesta por un régimen dictatorial y la represión, Carmen Franco pasa de puntillas y asegura que la dictadura era un sistema político que también existía en otros muchos países en aquel periodo, y que la represión era algo de lo que no se hablaba en la familia.
En lo que sí entra es en la pena de muerte y explica que la teoría que sostenía el general era que en casos de delitos de sangre, había que aplicar "el ojo por ojo y diente por diente".
(SERVIMEDIA)
04 Dic 2008
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