El órgano de gobierno de la compañía española ha solicitado a TXU la venta de dicho porcentaje del capital, porque excede del 5% que habían pactado ambas partes en un acuerdo estratégico suscrito el 11 de diciembre de 1998, y que la compañía norteamericana se comprometió a no superar sin el visto bueno del Consejo de Hidrocantábrico.

En as últimas semanas, TXU ha confirmado su estrategia de aumentar dicha participación, hasta declarar el control de un 13% de la eléctrica asturiana.

Dichas compras han motivado la reacción del Consejo de Hidrocantábrico, que requirió a TXU por vía notarial a cesar en las compras directas de acciones en bolsa, a vender el 'paquete' que excede del 5% y a no ejercer mientras tanto los derechos que le otorgan dichas acciones.

El rechazo de TXU al requerimiento notarial ha motivado que Hidrocantábrico nicie un procedimiento arnitral por discrepancias entre la Sociedad y sus acionistas, previsto en los Estatutos de la Sociedad de acuerdo con la Ley de Mercado de Valores.