Hernández Moltó, que tuvo una actuación destacada por la dureza on que trató a Mariano Rubio en su última comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso, ha formado parte también de la Comisión de Investigación encargada de analizar el supuesto uso de información privilegiada y enriquecimiento ilícito del ex gobernador del Banco de España.

Una vez que se han concluido los trabajos de la comisión, la opinión de este destacado diputado socialista es "que no hubiera sido necesario que su duración fuera tan larga, ya que ha habido asuntos de los investigados qu se alejaban del objeto de la comisión".

Sin embargo, reconoce que los trabajos de la 'comisión Rubio' han "acuñado una imagen de hombre escasamente honorable", que ha cometido irregularidades e ilegalidades, aunque matizó que la comisión "no es quién para determinar el alcance de estas irregularidades, cuestión que compete al ámbito judicial". "Siempre hemos intuido que hay más, pero nos hemos quedado en la simple intuición".

Hernández Moltó acusó a algunos de los partidos miembros de llevar preoncebidas sus conclusiones. "Hay grupos (en clara referencia al Partido Popular e Izquierda Unida) que no hubieran necesitado de las comparecencias, porque no se han movido ni un milímetro de sus posiciones iniciales, que eran que Felipe González era el responsable de la situación, lo cual devalúa mucho la imagen política de esos grupos y el rigor de su propio trabajo".

"Da la sensación que era el escenario que necesitaban esos grupos políticos para concluir lo que les interesaba concluir antes de esacomisión", indicó.

A pesar de estas críticas, Hernández Moltó reconoce que "el nivel de indignación que manifestabamos algunos grupos al principio de esta situación sobre la posición del señor Rubio estaba justificado. Ha mentido al Parlamento de la nación y ha despilfarrado el crédito personal que pudiera haber acumulado en los últimos años".

El portavoz socialista señaló que en todo este entramado "hemos encontrado barreras importantes" que han impedido demostrar fehacientemente el uso de inforación privilegiada o la utilización de su cargo para su enriqueciomiento personal o el de sus amigos o familiares.