Una de las más multitudinarias hermandades, la de Emigrantes, que partió de Huelva con cientos de romeros, provocó largas retenciones en diversos puntos de la capital onubense, pese al dispositivo de control dipuesto por Tráfico.

El Plan Romero-96, con unos 1.600 efectivos, fue puesto en funcionamiento ayer para prestar asistencia sanitara y seguridad durante la romería a los cientos de peregrinos que participarán en ella.

La aldea de El Rocío es el punto de destino para 99 hermandades filiales de la hermandad matriz de Almonte, que acudirán desde numerosos puntos de España, algunos tan alejados como Cataluña o Canarias.

Durante el próximo fin de semana se congregarán en el poblado rociero, donde se venera a la también conocida Blanca Paloma, cerca de un millón de romeros, que ya han mostrado su preocupación por el encharcamientoy barrizal de algunos tramos del camino.