El descubrimiento de la pieza se produjo en unas excavaciones que la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM) lleva a cabo en la confluencia de las calles Eugenia de Montijo y Durazno.

Técnicos del Museo Especializado de Madrid se trasladaron al lugar y se hicieron cargo de la obra, que posteriormente fue llevada al Museo Municipal, donde será limiada y restaurada.

Tras un estudio inicial, la directora del Museo Especializado, Carmen Priego, explicó a Servimedia que se trata de una diosa Diana hecha en mármol durante el siglo XVIII.

La estatua, que fue hallada sin la cabeza, presenta numerosos desperfectos ocasionados por golpes. Los brazos y una pierna están fragmentados, aunque los expertos disponen de la mayoría de los restos para reconstruirla.

Los técnicos consideran que la obra representa a la diosa de la mitología romana Diana "porque lleva un cesto para las flechas a la espalda y el pecho descubierto".

Según señalaron agentes de la Policía Municipal a los miembros del museo, la escultura pesa unos 500 kilos.

Fuentes del Museo Municipal informaron que en un principio pensaron que la obra podría pertenecer a una villa romana del siglo IV que fue descubierta en esa zona hace algunos años.

Sin embargo, pronto supieron que se trata de un caso aislado y que, probablemente, la escultura pertenecía a algún palacete del iglo XIX.

"Aunque no la hemos revisado a fondo, parece que corresponde al siglo XVIII y pudo pertenecer a un jardín de uno de los palacios residenciales del siglo XIX que se hicieron en ese barrio, donde tuvo su palacio el Marqués de Salamanca y otros nobles de la ciudad", aseguró Carmen Priego.

Las competencias de todos los hallazgos realizados en el subsuelo pertenecen a la CAM. La máxima responsable del Museo Especializado explicó que tomarán las medidas oportunas para la restauración y limpiea de la escultura.