La situación de Haití es muy compleja, dado que el presidente de la nación, Jean Bertrand Arístide, elegido democráticamente, está en el exilio, mientras el país sigue dirigido por los militares.

"Teníamos mucho interés en celebrar el Día Nacional de Haití, cmo cualquier otro país, pero desde la Expo-92 se exige la presencia en esa jornada de algún representante gubernamental y nosotros no estamos ahora en disposición de contar con la visita de algún dirigente de nuestro Gobierno", explicó en máximo responsable del pabellón de Haití.

En un principio, el Día de Honor de Haití estaba previsto para el 18 del pasado mes de mayo, pero tuvo que ser aplazado por los mismos problemas políticos que ahora impiden su celebración para el domingo.

Sin embargo, nose descarta la celebración del Día Nacional de Haití en una próxima fecha, aún sin determinar, antes de la clausura de la Expo, el 12 de octubre.

Hasta el momento, casi ningún Estado ha reconocido al actual Gobierno de la isla caribeña, país que atraviesa una muy delicada situación política. Los propios trabajadores del Pabellón de Haití señalan que "esta es una situación de incertumbre que nos preocupa mucho, ya que no sabemos qué va a pasar en los próximos meses".

DENUNCIA DE AI

Por otra part, la organización Amnistía Internacional publicó ayer un informe en el que denuncia el grave deterioro del respeto a los derechos humanos en Haití, tras asumir de nuevo los militares la dirección del país.

Según AI, desde el golpe de Estado centenares de personas han sido detenidas de manera arbitraria y sin ningún tipo de garantías judiciales y los militares les infligen fuertes palizas y torturas hasta la muerte.

"En Haití persiste el desorden y las fuerzas de seguridad saben que pueden cometerimpunemente las más horribles violaciones de derechos humanos", explica AI en su informe.

Asimismo, la organización humanitaria expresó su "honda precupación" por la situación de decenas de personas que han salido del país y han pedido asilo en Estados Unidos, "que se ha negado a cumplir las obligaciones internacionales a que está obligada, que insisten en que nadie puede ser repatriado si corre el peligro de ser objeto de violaciones de derechos humanos".

Según explica AI en el informe, miles depersonas han sido interceptadas en aguas internacionales y repatriadas directamente a Haití, sin estudiar las posibilidad de que puedan sufrir represalias por su intento de fuga.