La explotación del hipódromo corre a cargo de la Sociedad Hipódromo de Madrid, empresa de Enrique Sarasola, según el consejero, quien afirmó "LLevamos un tiempo largo sin que funcione. Además la sociedad está acumulando pérdidas y había tocado los niveles de quiebra técnica".

El consejero dijo que el Hipódromo de Madrid es un "problema empresarial muy serio, porque el modelo de gestión no está funcionando", y que es "muy pesimista, porque no se está dando ningún paso en la dirección que permita recuperar la posición que Madrid tuvo en el pasado en este terreno".

"Todos desearíamos que viniera un empresario que lo pusiese en marcha. Aí recibiría todo el apoyo de la CAM", destacó Blázquez, para quien hacen falta empresarios con vocacion y con ganas.

Tras reiterar que el modelo de gestión no funciona, "no sé si porque no puede hacerlo o porque otro lo haría mejor", Blázquez explicó que ningún otro empresario se ha dirigido a la CAM en busca de ayuda para sacar adelante el Hipódromo.

En su opinión, "hace falta otro sentido empresarial", porque el problema del Hipódromo "no es de dinero, sino de gestion y capacidad de convocatori, para volver a traerse a los propietarios de los caballos, que se los han llevado".

Blázquez recordó que otros hipódromos sí funcionan y que el de Madrid lo hizo en el pasado y expresó sus deseos de que funcione, porque está "bajo mínimos desde hace ya un tiempo largo y cada vez se va deteriorando más, hasta el punto que este año no ha habido carreras".