De Arístegui participó en el Campus FAES que la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales organiza este mes de julio en Navacerrada con una conferencia titulada "Estabilidad y evolución política en Oriente Medio: ¿existe o existirá una primavera democrática?".

A su juicio, "el islamismo radical funciona como una secta destructiva: te absorben, te lavan el cebrero y luego plantan en tu cabeza una idea distinta del Islam. Te dicen que todo lo aprendido en el colegio no vale y te dicen que sólo vale lo que ellos dicen".

Aseguró que no hay razones para comprender el terrorismo islamista, ya que sus impulsores utilizan "las mismas excusas" que cualquier otra banda armada para justificar sus acciones violentas.

En su opinión, la mejor manera de combatir el terrorismo islamista no es con una Alianza de Civilizaciones como la propuesta por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sino con una "alianza" entre los países que comparten unos principios y valores democráticos.

Dado que el islamismo radical se ha convertido en un "enemigo común" para Occidente, dijo, requiere que todos los países desarrollados le hagan frente "comúnmente", impulsando una "evolución política" en los estados más afectados por esta tendencia.

El diputado popular rechazó recurrir a una "revolución" o una "ruptura" para frenar la expansión del islamismo radical y vaticinó que, en naciones como Iraq, "el éxito de la democracia será el fracaso del yihadismo".