Vázquez, que intervino en unas jornadas sobre "El cambio permanente" organizadas por el PSOE de Cantabria, indicó que Leguina "lo que debe hacer es responder a la renovación que l pueblo madrileño le exige, ya que no le vota".

Rechazó asimismo las declaraciones de Leguina asegurando que dentro del PSOE "se está instaurando un cierto espíritu burocrático que hay que desechar", y solicitó al presidente madrileño que cese en este tipo de manifestaciones "que no responden al debate normal del partido y a muchos nos desagradan profundamente".

Sobre el papel de Alfonso Guerra en el próximo congreso del partido, el alcalde de la Coruña consideró que el PSOE "no se puede configuar sin la presencia del tándem González-Guerra"

Vázquez sostuvo que este dúo es necesario "en la dirección política, ya que aquí no se trata de relaciones personales sino de la responsabilidad de ambos". "Sin este tándem no tendría sentido el PSOE en cuanto a las dos personas que lo pueden aglutinar", indicó.

Afirmó también que la principal prioridad del PSOE es la de abordar la situación de España, "que es dura, muy dura", porque, a su juicio, se corre el riesgo de mantener "discusiones bizantins que, a veces, en determinadas personas, lo que tapan son luchas de poder personal".

A pesar de estas disputas, Vázquez indicó que, en el caso de González y Guerra, esta situación no se da "porque Guerra fue claro y rotundo al afirmar que él nunca sería el número uno".

Para el alcalde coruñés, Guerra "es un hombre complejo por la actitud de sus ideas, tiene para muchos compañeros la coincidencia de su visión del Estado y su concepto de un único partido".

Vázquez se mostró preocupado porque,en la actualidad el PSOE avanza hacia la idea de federación de partidos. "Parece que hay quien propugna un sanedrín de presidentes autonómicos y secretarios regionales, lo cual es ajeno a la historia del PSOE, que es solidaria e internacionalista. Aquí es donde coincido más con Alfonso Guerra".

Se refirió además a la polémica entre el portavoz del grupo parlamentario socialista, Carlos Solchaga, y el ministro de Obras Públicas, José Borrel, para asegurar que el ex ministro de Hacienda "está muy lejos e lo que son los fines del PSOE".

Para Vázquez, Solchaga no tiene "concepción urbanística" y defendió a Borrell a quien calificó como "un buen ministro desde el punto de vista político", "un gestor" y un "ministro de las ciudades".