GUERRA SOBRE BUSH: "UNO NO PUEDE SENTIR MÁS QUE ANTIPATÍA, SU ACTUACIÓN HA SIDO UNA DESGRACIA Y ROBÓ LAS ELECCIONES"
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El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra aseguró hoy que por el presidente de Estados Unidos, George W.Bush, "uno no puede sentir más que antipatía", porque su actuación ha sido "una desgracia para el mundo" y, además, "robó las elecciones a Al Gore".
En un almuerzo organizado por el Club Siglo XXI, Guerra subrayó que la relación de España con Estados Unidos debe ser buena, pero en gran medida eso depende de las autoridades estadounidense, y las actuales "lo ponen muy difícil".
Guerra explicó que su momento el ex presidente Ronald Reagan "nos parecía un hombre poco edificante intelectualmente", pero Bush ha demostrado que "aún se podía empeorar".
Hacia el actual presidente de Estados Unidos, sentenció, "uno no puede sentir más que antipatía", porque su política exterior ha sido "una desgracia para el mundo" y además "robó las elecciones" a su contrincante Al Gore. "No se si Gore hubiera sido mejor, pero peor imposible", apuntó.
En su opinión, la decisión del presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, de retirar las tropas de Iraq fue sólo "un gesto" que quedó grabado con fuerza en la memoria colectiva. "El mundo entero reconoce ahora que acertó, porque las quiere retirar todo el mundo. No hizo más que señalar el camino a Estados Unidos".
Guerra juzgó "dignos de consideración" los argumentos esgrimidos por el anterior Gobierno para enviar tropas a Iraq, en especial que España tenía que asumir su responsabilidad ante el terrorismo islamista porque la amenaza podía ser real en cualquier momento, también para los españoles.
Criticó, sin embargo, que cuando llegó esa amenaza en forma de atentados en el 11-M, el PP "se esforzó en convencernos" de que nada había tenido que ver el terrorismo islamista, es decir, cometió una "incongruencia".
Sobre la apuesta que hizo en su momento el presidente español por la victoria de Kerry frente a Bush en las presidenciales estadounidenses, Guerra reconoció que "lo políticamente correcto nos hace callar ante muchas cosas".
Sin embargo, se mostró partidario de hablar claramente cuando se cree que algo es perjudicial o beneficioso para los intereses del país. En su opinión, el mundo vive un "desorden ético" que debe ser afrontado y, por ello, "los compromisos un poco más allá de lo que dice la diplomacia, a mí me gustan".
Esa misma reflexión sirvió a Guerra para responder a la pregunta de si Rodríguez Zapatero se implicó demasiado en la aprobación de la Constitución Europea. En este asunto, Guerra añadió que, pese a valorar la voluntad de los partidarios de ese texto, está convencido de que la paralización de su aplicación "es segura".
(SERVIMEDIA)
18 Oct 2006
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