En declaraciones a Servimedia, el portavoz de la Plataforma Avícola Estatal, Javier López, aseguró que el cierre de las granjas ha sido acordado por el 90% de los ganaderos que utilizan sus instalaciones para el engorde de los animales, después de recibir los pollos y lo piensos de manos de los empresarios del sector avícola.

Según denuncian, esos empresarios les abonan "sólo" entre 35 y 40 pesetas por cada pollo que engorda hasta los 2,5 kilos, cuando estos mismos animales alcanzan en los puntos de venta un precio superior a las 700 pesetas.

Los granjeros aseguran que los precios permanecen sin variación desde hace 15 años puesto que los productores de pollos, agrupados en una organización interprofesional en la que sólo están los empresarios, "monopolizan" el ercado e "imponen" los precios a las granjas.

ENCARECIMIENTO

Por su parte, el secretario general de Propollo -asociación que agrupa a la mayoría de los productores-, Angel Martín, lamentó la convocatoria del paro para el 14 de diciembre y aseguró que lo único que va a conseguir es que "el precio se dispare en esas fechas navideñas".

Además, aseguró que la única pretensión de los granjeros es imponer un precio fijo para el engorde de cada pollo lo que, a su juicio, "es imposible en una economía ibre de mercado".

Finalmente, Martín dudó de que la Plataforma Avícola Estatal englobe a 5.000 granjas de las 6.500 existentes en España y afirmó que no es cierto que se esté pagando 35 o 40 pesetas por cada pollo engordado, sino que, en cada caso, granjero y empresario fijan el precio que les parece oportuno.

Por el momento, las posiciones de ambas partes están enconadas y no existen fechas para reuniones de negociación. Los granjeros, que ya utilizan el término de la "guerra del pollo", insiste en que dejarán los mercados desabastecidos si no pueden mejorar sus ingresos, puesto que, actualmente, venden por debajo de los costes de producción.