Según fuentes del Ministerio del Interior, los jóvenes detenidos son J.M.C., de 20 años, empleado en una empresa de reparación de teléfonos móviles de Alcobendas, y V.A.M, de 20 años, de Colmenar Viejo.

Al parecer, J.M.C. sustraía los teléfonos móvles, accesorios y piezas de recambio para su reparación cuando era necesario y V.A.M los vendía a unas 20.000 pesetas, un tercio de su valor real en el mercado.

La empresa de reparaciones de teléfonos móviles denunció la falta de numerosos terminales, cuyo valor en el mercado supera los 2.500.000 pesetas.

Los detenidos se encuentran a disposición judicial acusados de sendos delitos de hurto y receptación.