En rueda de prensa en la sede del instituto armado, Valdivielso presentó una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) acerca del nivel de aceptación de la Benemérita n la sociedad.

Como ejemplo del nuevo método de actuación instaurado desde que se hizo con la responsabilidad de la Benemérita, Valdivielso expuso que a lo largo de este año sólo el 7,6 por ciento de los ciudadanos ha sido denunciado por algún agente de la Guardia Civil, mientras que cuatro de cada diez ha recibido en alguna ocasión auxilio de un funcionario del Cuerpo.

Destacó "la política de seguridad vial que se quiere imprimir desde la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, consistente enuna mayor labor de prevención y educación y una menor acción represiva y sancionadora". Así, las denuncias efectuadas por la Guardia Civil de Tráfico descendieron en 1997 en 150.000, respecto de 1996.

Por otra parte, de acuerdo con los datos de la encuesta, realizada entre ciudadanos residentes en poblaciones de menos de 50.000 habitantes, más del 13 por ciento de la población se dirigió en el último año a alguna dependencia del instituto armado, bien para presentar una denuncia (más de la tercera pare), cumplir un trámite administrativo, solicitar información, demandar un servicio o auxilio o presentar una queja.

Resulta significativo, al respecto, que un elevado porcentaje de ciudadanos encuestados señalaron el estado deficiente de algunas instalaciones de la Benemérita.

En relación con la efectividad dela Guardia Civil, del total de denuncias interpuestas por ciudadanos que fueron víctimas de distintos delitos, el 36,5 por ciento fueron resueltas favorablemente.

Otro apartado de la enuesta se refiere a la sensación de seguridad de la población. Al respecto, un 32 por ciento opina que la seguridad ciudadana ha mejorado, frente a casi el 34 por ciento que opina lo contrario.

Por delitos, los que causan una mayor preocupación social son las agresiones sexuales, los atracos y los robos. Sin embargo, más de la mitad de los encuestados no adopta medidas para evitar ser víctimas de esos delitos. Así, el 97 por ciento de la población se muestra, además, contraria a llevar un arma como solción a sus problemas de inseguridad ciudadana.

El consumo de drogas aparece como la principal causa de la delincuencia, seguido del desempleo y la pobreza. Por el contrario, sólo el 6,4 por ciento achaca los niveles de delincuencia actuales a la poca eficacia de las fuerzas de seguridad.

Un dato destacado por Valdivielso es que la tasa de víctimas en la demarcación que cubre la Guardia Civil es de un 6,3 por ciento, cuando en las ciudades superiores a 50.000 habitantes es más del doble.

Con especto a la droga, resulta significativo que la mayoría de encuestados considera que para combatir sus efectos hay que perseguir a los grandes traficantes, pero al mismo tiempo mejorar los servicios de atención e información a los drogodependientes.