En la operación fueron detenidos tres italianos y quince españoles, que componían una red internacional de narcotráfico, y fueron requisados numerosos vehículos de gran potencia y equipos de funcionamiento por satélite y visión nocturna.

La operación comenzó hace meses, al tener conocimiento la Guardia Civil de la existencia de una organización de narcotraficantes que tenía su centro de operaciones en la Costa del Sol malagueña. Los agentes encargads del caso supieron que los narcotraficantes tenían previsto introducir una importante cantidad de hachís procedente de Marruecos y que sería desembarcada en un puerto deportivo de La Manga del Mar Menor (Murcia).

Los guardias civiles se desplazaron a la Comunidad de Murcia y, en colaboración con agentes de esta provincia y de la Fiscalía Antidroga de la citada ciudad, montaron una operación destinada a localizar el yate y detener a los integrantes de la red de contrabando. El yate fue localizado en e puerto deportivo Tomás Maestre de La Manga, donde fueron detenidas varias personas cuando se disponían a desembarcar el hachís.

En posteriores registros domiciliarios fueron halladas importantes cantidades de esta droga, que ya habían sido descargadas del yate, propiedad de una empresa de Gibraltar.