LA GUARDIA CIVIL DESCUBRE 64 AUTOBUSES CLANDESTINOS
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
La Guardia Civil de Tráfico ha descubierto durante la segunda quincena de julio a 64 autobuses que transportaban viajeros clandestinamente, por lo que les ha prohibido que continuaran con su actividad, según informaron hoy fuentes de la Dirección General de la Guardia Civil.
Este departamento puso en marcha el pasado día 15 e julio una campaña para intentar erradicar el transporte clandestino de viajeros por carretera, que aumenta notablemente durante las vacaciones estivales.
En los quince días transcurridos desde que comenzó la campaña, la Guardia Civil ha controlado un total de 2.329 vehículos, de los que 498 (el 25 por ciento) fueron denunciados y 64 fueron inmovilizados, obligando a trasbordar a 1.870 personas a otros vehículos legales para que pudieran continuar su viaje. En este período han sido denunciadas 278 emresas.
Según la Guardia Civil, el transporte clandestino de viajeros por carretera preocupa seriamente por la alarma social que se genera cuando algún vehículo ilegal, que no reune las condiciones técnicas adecuadas o con exceso de horas en sus conductores, se ve implicado en graves accidentes con víctimas mortales.
La Guardia Civil explicó que las vacaciones de verano, período en el que la densidad circulatoria es mayor en todas las carreteras, propician un gran incremento de esta actividad ilícta.
El objetivo de la campaña puesta en marcha el mes pasado es, según la Guardia Civil, controlar o intentar atajar este tipo de transporte y disminuir en lo posible los accidentes en el sector del transporte colectivo de viajeros.
Esta campaña se desarrolla en todo el territorio nacional, pero preferentemente en los ejes norte-sur, que, de acuerdo con la Guardia Civil, son en los que más se da este tipo de actividad ilegal.
Los guardias civiles cuando detectan un vehículo clandestino lo inovilizan en un lugar donde no moleste y pasan aviso al Centro Operativo de Tráfico, desde donde es enviado un autocar legal para que efectúe el traslado de los viajeros.
Si no se dispone de un autocar legal y las condiciones del autobus retenido, a juicio de la Guardia Civil, permiten seguir el viaje, los agentes autorizan la marcha, adoptando todo tipo de precauciones y acompañando una pareja de agentes al vehículo hasta el punto más próximo en el que se pueda realizar el trasbordo de viajeros.
egún la Guardia Civil, cuando se retiene a un autobús lo más frecuente entre los viajeros es que exijan que se les devuelva el dinero pagado por el billete o que se nieguen a abonar un nuevo billete al vehículo legal.
(SERVIMEDIA)
02 Ago 1994
NLV