La operación, en la que han sido detenidas siete personas y se han intervenido 25,347 kilos de cocaína y tres vehículos, se inició en noviembre de 1995, cuando un abogado que trabajaba para una organización de narcotraficantes que operaba en el aeropuerto de Madrid-Barajas propuso a un agente de la Guardia Civil cobrar una comisión a cambio de localizar a una persona que permitiera el paso de ua maleta por la aduana del aeródromo sin declarar su contenido.

El agente, cuya pertenencia a la Guardia Civil desconocía el abogado y que estaba destinado en el Organo Central de Policía Judicial, informó del asunto al Grupo de Investigación Fiscal y Antidrogas (GIFA), que inmediatamente inició un operativo para atrapar a los delincuentes.

El guardia civil siguió el juego a los narcotraficantes y presentó a los responsables de la organización a un miembro del GIFA, que se hizo pasar por el contato de la aduana que necesitaban y al que pagarían 800.000 pesetas por cada kilo de droga. El agente infiltrado del GIFA supo por los narcotraficantes que la maleta contenía estupefacientes y que no era la primera vez que realizaban esta operación con ayuda de contactos.

El agente del GIFA infiltrado presentó a la organizción a otro compañero, que haría el papel de "agente corrupto" destinado en el aeropuerto. Ambos estuvieron presentes desde entonces en todas las reuniones que celebraron los narcotrafcantes, que fueron estrechamente vigilados para garantizar la seguridad de los policías.

Gracias a esta investigación se supo que los miembros de la organización tenían una buena posición social, que disponían de un nivel económico alto y que en la operación estaba implicado un despacho de abogados ubicado en el centro de Madrid.

LA ENTREGA

El pasado 8 de junio tres personas, cuyos nombres se corresponden con las iniciales J.D.T., R.P.V. y M.P.H. y que llevaban el dinero para pagar a los contacos, recogieron la maleta, cuya entrega controlada fue previamente autorizada por el juzgado de guardia de Madrid.

En el momento de la recogida fueron detenidas las tres personas y requisados 22,465 kilos de cocaína y 12.865.000 pesetas, además de un Volkswagen Golf GTI. Ese mismo día se realizaron varios registros domiciliarios, uno de ellos en el fubete de abogados implicado.

El resultado fue la detención de cuatro personas -A.C.S., L-R. A.C., A.D.T. y P.M.M.-, la aprehensión de 2,872 kilos de ccaína y 1.675.000 pesetas y la intervención de un Mercedes y un Land Rover. El juez de guardia decretó el ingreso en prisión de los siete detenidos.