Cinco de estas empresas están situadas en Baeza y han sido acusadas de verter alpechín, producto residual de la fabricación del aceite, mezclado con aguas residuales al arroyo Matadero.

Otras dos fábricas son de la localidad de Canena y la última es una cooperativa de aceites de Cazorla. En este último caso, la denuncia se debe a la canalización de residuos a la red pública de alcantarillado del municipio, que a su vez vierte directamente al río Cazorla.

Durante la pasada campaña, la Agencia de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil presentaron un total de 120 denuncias contra almazaras jienenses por vertidos de alpechn a los ríos. Como consecuencia de los expedientes abiertos, fueron cerradas once fábricas.