La mitad de estas denuncias afectan a industrias que vierten productos ilegales en el río Llobregat y su cuenca, mientras que el 88 por ciento de las diligencias corresponden a vertidos de líquidos tóxicos. La mayoría de las empresas denunciadas se encuentran en las comarcas del Bages, Baix Llbregat, Maresme y Anoia.

Respecto a las infracciones medioambientales que tramita la Generalitat por vía administrativa y que comportan sanciones, la Guardia Civil denunció a casi 500 personas. Más del 57 por ciento de estas se realizaron a causa de vertidos sólidos como chatarras, coches abandonados o vertidos ilegales.

Asimismo, la brigada de Medio Ambiente de este cuerpo abrió otras 100 diligencias por erosionar los bosques con motos todo terreno. En opinión del portavoz del Gobierno Civil de arcelona, Eladi Ferreño, gran parte de estas acciones se deben a la falta de civismo y de educación mediomabiental de la población.

Un 68 por ciento de estas últimas infracciones tienen lugar en zonas de bosque, otro 15 por ciento en la atmósfera, un 10 por ciento en zonas rurales y un 7 por ciento en reservas y parques naturales.