El joven, que llevaba el rostro cubierto con un pasamontañas, entró en la oficina y, con las armas, obligó a todos a tirarse al suelo mientras pedía a un empleado que le entregase el dinero en una bolsa.

Al parecer el atracador se mostraba muy nervioso y con signos de drogodependencia, por lo que se le disparó el arma y una bala alcanzó el mostrador.

Tras conseguir el botín, el ladrón salió corriendo y el vigilante del anco intentó retenerle, ante lo que el joven volvió a disparar, hiriendo en una pierna al guarda.

Posteriormente el atracador le quitó el arma al guarda jurado y huyó. Sin embargo, tras una persecución, la policía logró detenerle y recuperar el millón cuatrocientas mil pesetas que consiguió llevarse de la entidad bancaria.

El vigilante jurado permanecía ingresado a primera hora de esta tarde en el Hospital La Fe de Valencia, aunque está fuera de peligro.