Esta coalición de organizaciones, entre las que se encuentran Greenpeace, Amigos de la Tierra y WWF/Adena, ha entregado también a la comisaria una demanda para que la Comisión escuche a los ciudadanos.

Según informó hoy Greenpeace, en la declaración se solicita a la Comisión que el nuevo sistema denominado REACH (Registro, Evaluación y Autorización de Sustancias Químicas) incluya, entre otras cuestines, la obligación de eliminar progresivamente aquellas sustancias químicas que se acumulen en animales, seres humanos o medio ambiente, y las que se comporten como disruptores hormonales.

También reclaman el "completo derecho a la información", tanto para consumidores como para empresas, incluyendo información sobre las sustancias químicas presentes en los productos de consumo.

Por último, subrayan el requerimiento de que los productos importados a la UE cumplan los mismos requisitos de segurida que los fabricados en la propia UE.

Greenpeace asegura que 300 sustancias peligrosas diferentes se han encontrado en tejidos humanos de personas no expuestas especialmente a estos tóxicos. También se han localizado sustancias químicas peligrosas en el agua de lluvia y en el polvo de las casas.