En el segundo trimestre de este año el grupo obtuvo un beneficio atribuido de 1.366 millones, cantidad que supera en un 15% la registrada en los tres meses anteriores.

Abbey, que este año consolida en cuenta de resultados por primera vez -en balance se consolidó a cierre de 2004- aporta un beneficio de 321 millones de euros en el semestre. Sin Abbey, el beneficio del Grupo Santander habría aumentado un 18,2% con respecto al mismo periodo del año pasado.

El crecimiento de la actividad ha permitido que el margen de intermediación alcance 5.008 millones de euros en el primer semestre de 2005, con un crecimiento del 29,7% (6,7% si se excluye Abbey) sobre el mismo periodo de 2004.

La progresión de las comisiones y de la actividad de seguros en un 7,8% y los resultados por puesta en equivalencia, que crecen un 59%, llevan el margen comercial a 8.600 millones de euros, con un incremento del 33,9% (8,7% sin Abbey).

La evolución de los resultados por operaciones financieras, que ascienden a 879 millones de euros, con un crecimiento del 36,7% (6% sin Abbey), sitúan el margen ordinario en 9.478 millones con una mejora del 34,2% (8,5% sin Abbey).

El beneficio atribuido al grupo después de impuestos y de minoritarios del primer semestre se eleva a 2.551 millones, con un aumento del 35,2%. Sin la incorporación de Abbey, el beneficio hubiera sido de 2.230 millones, con un crecimiento del 18,2%.

El 56% del beneficio se ha generado en los negocios del grupo en Europa Continental, un 32% en Iberoamérica y un 12% en Reino Unido (Abbey). Europa Continental mejora su beneficio un 40,6% e Iberoamérica vuelve a presentar tasas de crecimiento positivo en euros, de un 15,7%.

El volumen de fondos gestionados por el Grupo Santander ascendía a 881.325 millones de euros al cierre del primer semestre de este año, importe que supone un crecimiento del 81,2% en un año, variación que sería del 20,5% sin Abbey.

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