Una peseta ha sido el precio simbólico por el que el Grupo Orejas ha obtenido las acciones, por lo que se ha convertido en único propietario del astillero gijonés.

La crisis del astillero se inició cuando e grupo Duro Felgera, que poseía el 50 por ciento del accionariado de Nagisa, vendió su participación a Sallalero, propietario de Flebasa, con deudas millonarias en otros negocios.

La entrada de Victoriano Sallalero provocó la oposición del Grupo Orejas y de los trabajadores, que iniciaron movilizaciones de protesta y que llegaron a retener al empresario alicantino, por lo que éste ofreció finalmente sus acciones por una peseta.

El Grupo Orejas aceptó la oferta tras una reunión mantenida ayer con l consejero de Economía del principado, José Antonio González, que prevé una ampliación de capital de 250 millones de pesetas.

El comité de empresa cree que queda por aclarar las razones por las que Duro Felguera vendió a Sallalero toda su participación y los verdaderos motivos de la operación que acabó ayer.