Según estas organizaciones, el Código Penal "demoniza" el tráfico de drogas, sin tener en cuenta que en un gran número de ocasiones se tratan de delitos de pequeña escala más relacionados con el propio consumo que con el narcotráfico.

En un comunicado, las ONG señalaron que llama la atención que un "capo" de la droga pueda verse beneficiado con una rebaj de pena de hasta dos grados si colabora con la justicia, y un joven drogodependiente ya rehabilitado tenga que cumplir una pena de entre 9 y 13 años y medio porque en su momento pasó una "papelina" de heroína por 800 pesetas a otro joven que estaba en un programa de metadona.

"La sociedad no reclama este grado de dureza para este tipo de comportamientos", afirma la nota. "Propugnamos que se trate con el mismo humanismo penal a los narcotraficantes arrepentidos de gravísimos delitos que a sus víctimascuando cometen infracciones leves".