Los datos recogidos por estos especialistas indican que la tasa de niños prematuros en España se ha duplicado en los últimos cuatro años, pasando del 8 por ciento en 1987 al 16 por ciento en 1991.

El estudio "Umbral-94" pretende conocer, además, la incidencia que los cambios socio-culurales sufridos por la mujer en los últimos años tienen en el aumento de los partos prematuros y, por tanto, en el nacimiento de niños de bajo peso.

Según el doctor Juan del Rey, catedrático de Medicina Preventiva de la Universidad Autónoma de Madrid, una mujer que consume hasta 20 cigarrillos al día tiene un 50 por ciento de posibilidades de que su bebé nazca con un peso inferior al normal.

Cuando el consumo de la embarazada es superior a los 30 cigarrillos diarios, el riesgo de un nacimiento prmaturo crece hasta el 130 por ciento.

Las principales patologías asociadas a los recién nacidos de bajo peso son especialmente el sufrimiento cerebral y el síndrome de distress respiratorio, que afecta a la membrana hialina de los pulmones.

Los avances logrados en esta especialidad pediátrica han hecho posible que hoy un tercio de los niños que pesan menos de un kilo sobrevivan, cuando hace no menos de cinco años morían inevitablemente.

El presidente de la sección de Neonatología, Rafael Jimnez, ha reclamado en varias ocasiones un incremento en el número de estos especialistas, tanto médicos como enfermeros, para mantener la atención continuada de estos niños.