La corriente está adherida a los postulados de Nueva Izquierda y sus promotoras concluyeron ayer un documento en el que desarrolan un debate intenso y adoptan una postura más agresiva para conseguir la representación paritaria en los órganos de poder de la coalición y su traslado a la sociedad.

Teresa Heredero e Isabel López, técnicas del Ayuntamiento de Madrid, la arquitecta Mercedes de Castro, la abogada Teresa Sánchez, Carmen Paton, Nuria Roldán, Carmela Díaz y Rosa Arauzo, responsable del Centro de Estudios de la Mujer, son las ocho mujeres que han tomado la iniciativa.

"Tratamos de crear un 'lobby' interno, primero e Madrid y luego dentro de la coalición a nivel nacional, que sirva de puente entre los cargos públicos y las bases", explicó Arauzo.

"Queremos conseguir la rotación de responsabilidades y que las mujeres puedan incidir en la política global de Izquierda Unida y no sólo en los temas marginales que se articulan desde el Area de la Mujer", añadió.

Los trabajos del grupo comenzarán a incidir en los asuntos de política municipal, porque a juicio de Rosa Arauzo "es un microcosmos político más cercano alos ciudadanos que otras instituciones".