CEPAS calificó ayer de "más que posibles" las movilizaciones para el próximo mes, coincidiendo con las operaciones salida y retorno. La "pasividad" de la Administración les obliga a ello.

Tras las movilizaciones de agosto de 2004 y enero de 2005, que dejaron a cientos de conductores sin servicio, el Gobierno prometió una regulación sectorial en aspectos como al libre competencia y las relaciones comerciales. Pero, según CEPAS, no se ha tomado ninguna medida.

La decisión sobre el paro se tomará el próximo martes 25 de julio de 2006.