GRIÑAN ASEGURA QUE EL GOBIERNO NO ACCEDERA A LAS PRESIONES DE LOS SINDICATOS Y DE LA CEOE
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El ministro de Trabajo y Seguridad Social, José Antonio Griñán, aseguró hoy que el Gobierno no cederá ante las presiones de los sindicatos, en referencia a la huelga general de enero, ni de los empresarios, que consideran la reforma del mercado laboral insuficiente.
Griñán, que clausuró hoy unas jornadas sobre la reforma del mercdo de trabajo, organizadas por la Asociación del Progreso de la Dirección (APD), dejó muy claro que "el Gobierno no tiene por qué ceder ante nadie cuando hace una propuesta".
"El Gobierno dialoga y, en lo que es razonable, puede que modifique sus posiciones, como ha hecho estos meses, pero nunca porque ceda a unas presiones", dijo.
El ministro insistió en que la reforma laboral aprobada por el Gobierno "es la que necesita España" y aseguró que permitirá que las relaciones laborales sean lo suficintemente flexibles como para que las empresas no tengan que recurrir al despido de trabajadores para adaptarse a las circunstancias y puedan optar por otras vías como la movilidad, flexibilidad de jornada y otras.
Griñán informó que a finales de este mes se remitirán con toda probabilidad al Parlamento los proyectos de ley que regulan las empresas de trabajo temporal modifican el Estatuto de los Trabajadores.
Sobre este último, Griñán dijo que no cree que dejar en manos de la negociación colectiv aspectos como jornada laboral, horarios, vacaciones y otros, vaya a aumentar la conflictividad.
"No hay ningún país en Europa donde la regulación de las relaciones laborales no se produzca por la negociación colectiva", indicó. "Los empresarios y los sindicatos tienen que negociar porque el sistema de relaciones laborales tiene que ser lo que ellos quieren que sea".
A la pregunta de qué eficacia tendrá una reforma laboral que no ha sido consensuada con los agentes sociales, Griñán respondió que la misma que el Estatuto de los Trabajadores, que tampoco fue consensuado. No recuerdo ninguna reforma laboral consensuada. El acuerdo económico y social (AES) sí que lo fue y decía algunas cosas que igual hay que recordar".
"NO SOY PROFETA"
Preguntado sobre cómo cerrará España el año 93 en términos de paro, después de que Nicolás Redondo asegurara que a finales de año habrá 4 millones de parados y José María Cuevas hablara ayer de 3,8 millones de desempleados, el ministro de Trabajo dijo: "entre mi cualidades no figura la de ser profeta. Yo no sé si en la de estos señores figura esta faceta, pero en la mía no".
Asimismo, dijo que la subida del IPC del 0,2 por ciento en el mes de noviembre, dato dado a conocer hoy, está por debajo de las previsiones y "esperamos que diciembre se comporte igual, con lo que superaremos el objetivo que teníamos previsto del 4,5 por ciento para 1993".
Sobre la invitación de la CEOE a los sindicatos a negociar un pacto de rentas, Griñán dijo que le parece "una bena iniciativa" y señaló que dependerá de ambas partes que salga o no adelante.
También se refirió a la propuesta del PP de rebajar la edad máxima de 25 años para los contratos de aprendizaje y dejó muy claro que el Gobierno es partidario de mantener esa edad como figura en el decreto-ley.
CUATRO LEYES MAS
Por su parte, el secretario general de Empleo, Marcos Peña, que también participó en las jornadas, anunció que el Gobierno prepara cuatro leyes para el año que viene que complementarán la refrma laboral aprobada ahora.
Esas cuatro normas serán ley de protección por desempleo, la ley de riesgos laborales, la ley que reformará el INEM y la ley de incapacidades laborales, que fusionará la incapacidad laboral transitoria (ILT) con la invalidez provisional en una única nueva figura, que es la incapacidad provisional.
Tanto el ministro Griñán como Marcos Peña aseguraron que la intención del Ejecutivo es negociar estas leyes con los agentes sociales. En cualquier caso, el secretario generalde Empleo dejó muy claro que el referente principal del Gobierno no es el acuerdo, sino el empleo.
Peña reconoció que la falta de consenso en la reforma laboral restará eficacia a las medidas tomadas por el Gobierno. "Yo siempre he considerado que la legislación laboral es especialmente sensible y que para lograr la máxima eficacia hay que conseguir el máximo grado de consenso, porque si no, se limita esa eficacia", concluyó.
(SERVIMEDIA)
15 Dic 1993
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