Consumo

Greenpeace 'trolea' su pancarta gigante en la Gran Vía madrileña contra las macrogranjas

- Colgó la lona el martes con el mensaje ‘Las macrogranjas no existen’ y lo completa con ‘pero cerradlas ya’

- España tiene 507.020 explotaciones ganaderas, es decir, una por kilómetro cuadrado

MADRID
SERVIMEDIA

Activistas de Greenpeace se colgaron este jueves en una fachada de la Gran Vía de Madrid para pedir el fin de la ganadería industrial y el cierre de las macrogranjas. La organización colocó allí este martes una lona gigante, de más de 30 metros, con la frase ‘las macrogranjas no existen’, en alusión a las declaraciones que algunos políticos estos días, y hoy completaron la acción con el mensaje ‘pero cerradlas ya’.

Con esta denuncia en dos fases, Greenpeace quiso manifestar “lo sorprendente que resulta que la clase política española desoiga las evidencias sobre el daño de la ganadería industrial y genere un circo mediático sobre un tema indiscutible”. “Las macrogranjas no sólo existen, sino que se están convirtiendo en uno de los principales problemas ambientales de nuestro país”, sentenció.

Además de pedir el cierre de las macrogranjas, Greenpeace quiso también invitar a reflexionar sobre “el negacionismo y los bulos” en el reciente debate sobre las macrogranjas.

El responsable de agricultura en Greenpeace España, Luís Ferreirim, apuntó que “no se debe convertir la ganadería industrial en un arma electoral arrojadiza”. “En plena emergencia climática, no hay tiempo que perder sino de solucionar. Greenpeace pide a todos los partidos, y en particular a quienes tienen en este momento competencias sobre las macrogranjas, responsabilidad para poner fin a este problema, que está provocando el incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero, envenenando las aguas del país, maltratando a los animales y agravando el despoblamiento rural”, añadió.

Según Greenpeace, la producción de carne ha crecido de forma exponencial en España (casi un 1.000% desde los años 80), frente a poco más del 150% en la UE o en otros países como Alemania, Dinamarca o Francia.

CONSECUENCIAS “A LA VISTA”

La organización subrayó que la “inmensa mayoría” de alimentos de origen animal producidos en España provienen ya de la ganadería industrial y agregó que “las consecuencias están a la vista”. De hecho, la Comisión Europea ha llevar a España ante el Tribunal de Justicia de la UE por la grave contaminación del agua por nitratos, que ha dejado incluso a muchos pueblos sin agua potable.

Según la Comisión Europea, España tiene un “problema sistémico” en su modelo agroalimentario que ha llevado a esta situación. Afirma, además, que el 81% de las aportaciones de nutrientes a los sistemas acuáticos en Europa están provocados por la ganadería.

Por otro lado, el 65% de las emisiones de gases de efecto invernadero del sector agrícola (de las pocas que han crecido en 2020) y el 94% de las emisiones de amoniaco, declaradas en el Registro Estatal de Emisiones y Fuentes Contaminantes, están generadas también por la ganadería. “Si la ganadería industrial es claramente la predominante en España, es también la principal responsable de estos problemas”, sentenció Greenpeace.

NORMATIVA

Esta semana, el Gobierno ha aprobado un real decreto para reducir la contaminación por nitratos, lo que Greenpeace consideró “un paso para afrontar este grave problema”, pero recalcó que “va a seguir siendo insuficiente si no se va a la raíz del problema: la agricultura y la ganadería industrial”.

Actualmente está en preparación el primer real decreto de ordenación bovina. Según Greenpeace, de no eliminarse o modificarse la redacción actual de la disposición transitoria primera se permitiría la puesta en marcha de los proyectos ya en trámite, como el de Noviercas (Soria), donde se pretende explotar hasta 23.520 vacas, más de 20 veces la capacidad máxima establecida en el borrador del real decreto.

En España existen 507.020 explotaciones ganaderas activas, esto es, una por kilómetro cuadrado. La superficie afectada por la contaminación por nitratos (el área incluida dentro de las Zonas Vulnerables a Nitratos) alcanza ya casi a una cuarta parte del país y sólo en 2020 se sacrificaron más de 910 millones de animales para consumo humano.

Con estas cifras, Greenpeace urgió a establecer una moratoria inmediata a la ganadería industrial en toda España, tanto a nuevos proyectos como a ampliaciones de los existentes, así como a aquellos que están en tramitación; reducir al menos un 50% la cabaña ganadera en intensivo de aquí a 2030; rebajar el consumo de carne hasta alcanzar un máximo de 300 gramos por persona a la semana, y apostar por la ganadería extensiva de base agroecológica y de pequeña escala.

(SERVIMEDIA)
20 Ene 2022
MGR/gja