GREENPEACE SUSPENDE LA POLITICA AMBIENTAL DEL PSOE

- Las experiencias del Gobierno del PP en comunidades autónomas no hacen concebi a los ecologistas grandes esperanzas ante una hipotética victoria electoral de Aznar

- Greenpeace presenta a los partidos 96 propuestas ambientales para que las incluyan en sus programas

MADRID
SERVIMEDIA

La organización ecologista Greenpeace ha presentado a los partidos políticos 96 demandas ambientales ante las próximas elecciones, con el objetivo de que las tengan en cuenta en el proceso de elaboración de sus programas y en las políticas que desarrolle la formación que formeGobierno.

Sin embargo, Juan López de Uralde, portavoz de Greenpeace, no se mostró excesivamente optimista ante el futuro tras analizar las políticas ambientales desarrolladas por los distintos partidos.

Greenpeace ha calificado con suspenso la política ambiental del PSOE en la última legislatura, por entender que ha primado la construcción de grandes infraestructuras sin tener en cuenta su impacto social y ambiental.

López de Uralde destacó el proyecto de construcción de la autovía de Valenca sobre las hoces del río Cabriel, la incapacidad del Gobierno para aprobar el decreto de Envases y Embalajes y la no paralización de las obras del pantano de Itoiz, a pesar de que una sentencia de la Audiencia Nacional las ha declarado ilegales.

Sin embargo, las experiencias de poder desarrolladas por otras fuerzas políticas en ayuntamientos y comunidades autónomas, hace que Greenpeace no conciba grandes esperanzas ante la posibilidad de un hipotético cambio de Gobierno tras el 3 de marzo.

Juan ópez de Uralde se refirió al Ayuntamiento de Madrid, para señalar que en este caso "no se puede siquiera evaluar la política ambiental del equipo de Gobierno municipal porque no existe".

Ante esta situación, la organización ecologista ha propuesto a los distintos partidos casi un centenar de medidas que, a juicio de Greenpeace, mejorarían la situación ambiental del país.

MINISTERIO DE MEDIO AMBIENTE

Los ecologistas proponen la creación de un Ministerio de Medio Ambiente que aglutine todas las cmpetencias de la Administración central, aunque matiza que no es suficiente para desarrollar una política eficiente en este campo.

Este ministerio debería conseguir modificar el actual Plan Energético Nacional, para conseguir ahorrar en los próximos dos años 1.200 megavatios aplicando medidas de eficiencia energética.

Asimismo, piden el cierre progresivo de las centrales nucleares y una moratoria en la construcción de nuevas centrales térmicas, para conseguir estabilizar en el año 2000 los nivele de las emisiones de CO2 respecto a los de 1990.

En materia de residuos, la organización ecologista considera necesario realizar un inventario que aclare la cantidad total de residuos que se producen anualmente en España y reitera su oposición a la incineración de las basuras.

También propone la retirada del último borrador de Plan Hidrológico Nacional elaborado por el Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente y su sustitución por otro que no contemple trasvases entre cuencas, paalice los proyectos de construcción de grandes embalses como el de Itoiz o Irueña y tenga en cuenta los objetivos futuros de un Plan Nacional de Regadíos que no amplíe la superficie regable.

Además, Greenpeace incide en las políticas pesqueras e insiste en solicitar la prohibición del uso de redes de deriva en la Unión Europea y en las políticas forestales, pidiendo la reducción de la presión fiscal sobre los propietarios de bosques.

(SERVIMEDIA)
19 Ene 1996
GJA