El programa de Gobierno que debate el XI Contreso del Partido Popular incluye un documento sobre energía que contempla el uso y potenciación de la nuclear.

En la misiva, Greenpeace le sugiere a José María Aznar que el futuro de las políticas energéticas radica en la eficiencia y las fuentes renovables, ya que garantizan el suministro a costes menores y el uso racional de los recuros naturales.

Los conservacionistas recuerdan al presidente del PP que la nuclear no constituye la principal aportación de energía primaria al sistema energético español.

Además, afirman que esta fuente energética ya ha fracasado económicamente en países como Estados Unidos, el Reino Unido o Francia.

Según Carlos Bravo, portavoz de Greenpeace, con esta iniciativa pretenden demostrar a los dirigentes del PP que la nuclear "no es una energía limpia, como lo demuestran los residuos radiactivos ue se producen en las centrales".

"Los numerosos accidente nucleares ocurridos en cualquier país con centrales nucleares", agregó, "demuestran que esta energía es peligrosa y que ningún diseño de reactor es seguro".