Las pancartas recogían el lema "Incineración de residuos: Jugamos con fuego. ¡Producción limpia ya!", en los diez idiomas de la Comunidad Europea.

Según la portavoz de Greenpeace en Bruselas, Lisa Finaldi, "incinerar residuos tóxicos es jugar con fuego y la industria está jugando con la vida de la gente".

"Los ciudadanos", agregó, "se están uniendo para prevenir las graves consecuencias que supone tener una incineradora de residuos en la puerta de ss casas".

España es, según Greenpace, uno de los países de la CE con mayor número de proyectos para la construcción de nuevas plantas de residuos tóxicos y peligrosos, "ya que el Gobierno planea construir cuatro".

Un informe elaborado por la organización internacional revela que las incineradoras pueden estar cumpliendo los límites de emisión establecidos y, sin embargo, estar mandando a la atmósfera miles de toneladas "de peligrosos compuestos químicos cada año".

El estudio señala que, en l actualidad, no existen sistemas eficaces de control de emisión de metales pesados y compuestos formados durante la combustión.

Asimismo, Greenpeace mantiene que las poblaciones que viven cerca de incineradoras presentan elevados índices de cáncer, enfermedades respiratorias y defectos de reproducción.

Como alternativa, la organización propone el establecimiento de una moratoria en la construcción de nuevas plantas y en la ampliación de las que ya funcionan, así como la inmediata prohibición de l incineración de residuos que contengan metales, cloro y organohalogenados.

Además, exige el establecimiento de una fecha de cierre de todas las incineradoras existentes y el desarrollo de programas de producción limpia para eliminar procesos y productos.